Los ETF son productos derivados a los que accedes casi sin darte cuenta, pues están disponibles en el mismo mercado que las acciones. Por ejemplo, si puedes comprar MSFT (acciones de Microsoft), puedes comprar SPY (ETF que replica al S&P500)
Los futuros son probablemente el producto financiero más eficiente que existe, aunque requieren de enormes dosis de experiencia y un tamaño de cuenta muy respetable.
Están pensados para operar principalmente en materias primas e índices en intradía.
Opciones
Las opciones son derivados financieros apalancados que se pueden utilizar para hacer coberturas o para especular directamente.
Son productos complejos que incorporan el factor tiempo, aunque ello abre un nuevo campo de posibilidades.